M.V.M.

Creado el
18/2/2002.



Prólogo por Manuel Vázquez Montalbán a

Si Ud. no hace regalos le asesinarán

de Vicente Verdú, editado por Anagrama, Barcelona, 1971


Vicente Verdú ha descubierto la muerte de la Literatura.

De la Literatura a través de kilómetros y kilómetros de lenguaje encerrados en una caja de música.

Vicente Verdú ha descubierto la muerte de la Literatura encerrada en la jaula de cristal de la organización cultural capitalista, postcapitalista, supracapitalista, subcapitalista, incapitalista, outcapitalista, siempre capitalista.

Prefiere enterarse sólo de las frases eternas; sirven para fingir que se entiende todo lo que no se entiende; en definitiva nos ayudan a fingir la normalidad, nos evitan los fusilamientos de las ventanas, los ojos, los fusiles, todos los amenazadores agujeros y ranuras de la otredad.

La lógica se destruye cada vez que unimos el principio con el final del mundo.

La lógica se destruye cada vez que unimos el sujeto de una bebida refrescante con el predicador de la campaña de protección del peatón portador de valores eternos.

Por eso Vicente Verdú ha descubierto la evidencia de que por dos pesetas diarias usted recibirá más de 300 libros y de que sólo le queda la opción de pensar en su familia.

Vicente Verdú es idiota.

Yo soy idiota.

Usted tampoco es idiota, pero todo conspira para que lo sea.

Sus hijos conocen perfectamente la poética de los anuncios, la sintaxis del orador radiofónico, todos los metalenguajes de la princesa de telefilm y los guerreros del telediario.

Usted empezó leyendo Fabiola, desgraciado.

Vicente Verdú pone en anuncios todas las mediocridades por las que usted se deja vivir y matar.

Cada cartulina de este idiota alicantino vale por tres estanterías llenas de libros de la Biblioteca del Valle de los Caídos.

Usted sí que sabe.

Marchando: cinco tanques con la etiqueta de garantía.

Motivos por los que usted debe participar en las próximas elecciones sindicales: más cantidad, más sabor y sólo cuesta tres pesetas.

Oh, no.

No, no todo es política. Verdú también ha visto las nalgas de Cristóbal Colón y los senazos de la cigarra de Lafontaine.

Por eso su método es completo. Enseña a pulsar las venas como un arpa, a tocar lejanos pianos de arcilla con los ojos abotonados por el crepúsculo, ES UN HECHICERO CULTURAL DE LOS DE DESPUÉS DE LA GUERRA.

ETIQUETA DE GARANTIA